En 1960 el peso promedio de una mujer era de 64.5 kilos. En 2010 pasó a ser de 75. Siguiendo esta tendencia, las tallas de ropa aumentaron y se modificó su denominación. Marilyn Monroe generalmente usaba la 14, lo que hoy sería una entre 2 y 4. Ella era de baja estatura con cintura de 55 centímetros.
Aunque todos sabemos que nuestra dieta es la causa de este incremento de peso, la gran mayoría de las personas añora su figura juvenil. No hay problema, existe una solución: los consultores de imagen pueden hacer maravillas con las ilusiones ópticas y el camuflaje en la vestimenta. Aquí te presentamos algunos consejos para recuperar tu figura:
No te preocupes por el número de talla. Dado que no existen en el mundo de la moda tallas estandarizadas, con toda seguridad pertenecerás a una de ellas dependiendo del fabricante. Las prendas muy grandes pueden añadir volumen a tu figura, mientras que las prendas que son muy pequeñas pueden apretar lugares poco halagadores e inapropiados, acentuando las “llantitas” o dando forma a la “sonrisa” en la entrepierna. Enseñamos a nuestros clientes que la ropa generalmente necesita las alteraciones de un experto para meter y sacar donde sea necesario. Asegúrate de cortar la etiqueta de la talla para evitar la obsesión por ella.
Compra prendas que se ajusten a la parte más ancha de tu cuerpo y modifica lo demás. Dos situaciones muy comunes para mujeres de tallas grandes: los pantalones que ajustan en el tiro pero quedan sueltos en las caderas, y las blusas que ajustan en la cintura pero quedan muy apretadas en el busto. Tómate el tiempo para encontrar la prenda que se deslice suavemente sobre tus partes más anchas y ajusta o modifica el resto. Esto puede subir el precio de la prenda, pero el ajuste correcto te hará ver más delgada y los pesos invertidos cobran valor pues la prenda va a durar más tiempo, ya que el desgaste en las costuras y el tejido se reducirá.
Identifica las marcas que diseñan ropa para tu figura. Algunos diseñadores usan un patrón y a partir de él maquilan tallas de pequeña a extragrande. Ese enfoque no tiene en cuenta que las curvas y proporciones de las mujeres de mayor tamaño son diferentes que sus contrapartes más pequeñas. Encuentra establecimientos que ofrezcan amplia variedad de tallas y servicio de ajuste a tu medida.
Al momento de vestir las curvas, piensa en largo y drapeado. Las mejores telas para mujeres de tallas grandes son las que se usan para el drapeado y que tienen caída, no las gruesas y tiesas. Piensa en jersey, rayón, poliéster, gasa y seda.
Algunos tipos de lana, como el crepé, son ideales y lucidores, ya que tienen un rizo natural que es flexible y se dobla cómodamente. Usar cualquier tela flexible es un verdadero placer. Así como todo lo que tenga de 2 a 3% de elastán o licra. Prueba a usar un cárdigan con caída en línea recta y pantalones ajustados en las piernas, notarás tu figura más delgada en minutos.
Estilos. Los mejores estilos de prendas son los cruzados en el busto, los que envuelven la figura, los drapeados, y los de cuello en V o de hamaca. Vestidos que acentúan la cintura son más halagadores que los holgados. Mangas que llegan al codo o al hueso de la muñeca son geniales para reducir el ancho de la cadera. Los mejores cortes de cabello son los medianos y con volumen, nunca muy cortos o por debajo de la clavícula. Usar escotes con la profundidad del largo de tu cara para exponer tu cuello y pecho hará que te veas mucho más esbelta que con un escote alto. Colores oscuros en los lados que vayan a lo largo del vestido o traje de baño visualmente alargarán y adelgazarán tu figura.
Todas las faldas, tops, vestidos y pantalones necesitan ser un poco más largos de lo que las personas más delgadas normalmente usarían. Esta longitud adicional, con un par de tacones, no sólo te ayudará a verte más alta, sino también que la tela se acomode en las curvas con más elegancia y sutileza. Los vestidos que cubren la parte posterior de la rodilla y los pantalones que tocan la parte delantera del zapato son más favorecedores pues alargan la figura, no la ensanchan.
Elige la ropa interior apropiada. Así como usar ropa en la talla correcta te ayudará a verte más delgada, la ropa interior ajustada correctamente mejorará radicalmente tu figura. Un brassier bien ajustado no sólo ayudará a reducir los dolores de espalda y cuello, sino que también suavizará tu figura y hará que las prendas ajusten adecuadamente. La mayoría de las mujeres con busto grande los usa de media copa. Éstos pueden ser sexys para una vestimenta de noche con un escote bajo, pero para uso diario puede resultar incómodos e incluso puede dividir el busto a la mitad, simulando tener cuatro pechos. Las fajas son un invento maravilloso pero muchas veces en lugares calurosos pueden sentirse como una armadura medieval. En ocasiones especiales pueden utilizarse para estilizar la figura.— María Elena Ponce Laviada, Trendsitions. contacto@institutomegamedia.mx.