LONDRES (EFE).- Un pequeño devoto de la Iglesia Ortodoxa Copta de Stevenage, en Hertfordshire, afirmó ayer que “con toda seguridad” guardará toda su vida una autofoto que se hizo con el príncipe Carlos durante su visita al templo.
El hijo mayor y heredero de la reina Isabel II acudió el martes pasado a la iglesia para homenajear la tolerancia de sus fieles y asistir a unas conferencias sobre la persecución que sufren los cristianos en algunas zonas de Oriente Medio.
Al final de la visita, un niño que estaba en el templo se dirigió a él y le pidió permiso para que se hicieran una foto juntos. El príncipe Carlos “vino hacia mí y me chocó la mano, así que me incorporé y le pregunte sí podía hacer una foto, sin esperar a que los guardaespaldas me mandaran irme”, explicó el menor -cuyo nombre se mantiene reservado- a la cadena británica BBC.
En la foto, tomada por el niño con la cámara de un teléfono celular, el príncipe Carlos sale mirando hacia abajo -desde donde el chico hizo la fotografía- y en la esquina inferior derecha aparece la cara sonriente del menor. “Es una foto muy buena, salgo muy cerca de él”, dijo el autor de la “selfie”, quien se confesó “muy emocionado” por haber conocido al heredero al trono británico.
“Es una experiencia que nunca había tenido antes”.
“Es increíble tener una foto con un miembro de la familia real”, añadió.