La Navidad es una de las festividades más importantes del cristianismo y tiene como finalidad celebrar el nacimiento de Jesús de Nazaret.
Es la época más bonita del año. Para estas fiestas las ciudades se engalanan con adornos, árboles y luces de colores, lo mismo que nuestros hogares. Es un acontecimiento que emociona a todos, pero los más pequeños de la casa son los que verdaderamente disfrutan la Navidad, colocando todas las piezas del Belén o Nacimiento: San José, la Virgen y el Niño Jesús; la estrella, los Reyes Magos, el burrito, la vaca.
Es época de villancicos, del árbol de Navidad, las luces y, por supuesto, los regalos.
Es el momento propicio para reunirse con familiares y amigos y compartir nuestra alegría celebrando en torno a una mesa, pero, como siempre, hay que respetar ciertas normas de etiqueta para que estas fiestas sean celebraciones con éxito.
Hay que tratar de ser puntuales, tanto por las personas que han llegado a tiempo como para las que se preparan para comer, ya que la comida debe servirse a la hora prevista. En la mesa, al haber más personas de lo habitual, se pondrá un cartelito con el nombre de la persona que ocupará ese sitio, así cada quien estará sentado donde le corresponde.
Para estos días tan especiales se acostumbra vestir elegante y unos días antes, si se puede, tomar un tratamiento para tener la piel mejor. La convivencia en estas fechas se acentúa, se tiene mucha vida social, se convive con amigos y familiares y el comportamiento nuestro y del resto de las personas es muy importante para lograr una convivencia pacífica y cívica.
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*) Experta en protocolo y etiqueta, y artista plástica. Correo: pvarases@yahoo.