HOUSTON.— Cuando hacemos ejercicio nuestro cuerpo no requiere la misma cantidad de oxígeno que cuando dormimos. Esta diferencia es percibida por el corazón, que ajusta constantemente su capacidad de bombear oxígeno a través de la sangre a las actividades del día.
Sin embargo, cuando se presentan enfermedades crónicas, como la insuficiencia cardíaca (IC), que afecta a la irrigación correcta o bombeo de sangre oxigenada al resto del cuerpo, este sistema de reconocimiento falla y la persona puede presentar falta de aire y cansancio rápido al realizar tareas de poca demanda energética.
La insuficiencia cardíaca es resultado de problemas como la cardiopatía isquémica, la cual es una alteración en el corazón que impide el aporte adecuado de oxígeno. Fue reportada como la primera causa de muerte en México en 2013.
La insuficiencia cardíaca también representa un alto índice de ingresos por emergencia en los centros hospitalarios, según indica el doctor Barry Trachtenberg, cardiólogo del hospital Houston Methodist.
Según nos informan, los adelantos tecnológicos en materia de salud siguen brindando valiosas aportaciones, como ocurre con el CardioMems, un dispositivo manufacturado por la casa St. Jude, que mide menos de dos centímetros y que al ser implantado en la arteria pulmonar del corazón es capaz de advertir al especialista de complicaciones incluso tres semanas antes de que puedan afectar al paciente.
El aparato, con fines preventivos, ha sido sometido a importantes estudios como el Champion de la Universidad de Ohio.
Resultados En corto
Logros
El doctor Barry Trachtenberg señala que la implantación del dispositivo CardioMems ha mostrado resultados impresionantes, como la disminución del 30 por ciento de las hospitalizaciones por insuficiencia cardíaca en pacientes del Houston Methodist, donde regularmente se es colocado este dispositivo.