Ciudadanos de México, Colombia, Chile, Argentina y Costa Rica confiesan que para ellos mismos y para familiares que sufren hipertensión pulmonar el solo hecho de respirar es toda una odisea y una nueva oportunidad de vida.
En el marco del taller sobre el tema que se realizó el martes pasado en la ciudad de México, integrantes de la Sociedad Latina de Hipertensión Pulmonar expusieron el impacto que este mal ha tenido en ellos como pacientes y como familiares de personas que lo sufren.
“¿Saben la impotencia que se siente no sólo al saber que tienes poco tiempo de vida sino que no tengas energías para levantar a tu hijo de seis años de edad para llevarlo a su cama cuando se queda dormido?”, expresó con la voz entrecortada Carlos Barrantes, de Costa Rica.
Estos grupos de pacientes ubicados en toda América Latina siguen luchando para que en sus países estén disponibles más tratamientos contra el mal.— R.M.M.