MIAMI.- Según una nueva investigación, los trasplantes tempranos de células madre no mejoran la supervivencia general de los pacientes de alto riesgo de linfoma no Hodgkin agresivo, pero resultarían beneficiosos para un pequeño grupo de pacientes con el riesgo más elevado.
Probablemente esto se deba a que a los pacientes en el grupo de control que recayeron luego se les ofreció un trasplante de células madre, según el doctor Patrick Stiff, director del Centro Oncológico Cardenal Bernardin de la Universidad de Loyola, y colegas.
El trasplante de células madre no mejoró la supervivencia general en todo el grupo de pacientes de riesgo alto y riesgo intermedio alto, indican los autores del estudio. Sin embargo, sí pareció beneficiar a un grupo de pacientes en alto riesgo. Entre esos pacientes, la tasa de supervivencia a los dos años fue del 82 por ciento en el grupo de trasplante y del 64 por ciento en el grupo de control, según el informe, que aparece en la edición del 31 de octubre de la revista “New England Journal of Medicine”.
Equivalencia
“El trasplante temprano y el trasplante tardío parecen ser métodos más o menos equivalentes en el tratamiento de los grupos de riesgo combinado”, afirman los investigadores. Sin embargo, “el trasplante temprano parece ser beneficioso para el pequeño grupo de pacientes que presentan una enfermedad de alto riesgo”, concluyen los autores.
Se espera que los hallazgos “fomenten conversaciones entre esos pacientes y sus médicos respecto a la factibilidad de realizar trasplantes tempranos”, comenta doctor Patrick Stiff, director del Centro Oncológico Cardenal Bernardin de la Universidad de Loyola.
Se espera que los hallazgos con estos estudios fomenten conversaciones entre pacientes y médicos respecto a la factibilidad de realizar trasplantes tempranos.