
WILSALL, Montana (AP).- Los restos de un niño muerto hace 12,600 años fueron enterrados de nuevo en una ceremonia nativo americana, después de que un equipo de científicos recuperase ADN del menor, hallado en 1968 en el centro de Montana.
Los restos del niño volvieron a colocarse lo más cerca posible del entierro original. A la ceremonia, el pasado fin de semana, acudieron dos equipos de grabación y una treintena de representantes de tribus de Montana y Washington, según reporte de “Billings Gazette”.
“Espero que éste sea el cierre final para ti también, como lo es para nosotros”, dijo Thomas Larson Medicine Horse Sr, anciano tribal de la comunidad Cuervo, dirigiéndose a la familia en cuya propiedad se encontró el niño.
El ADN extraído del pequeño ofreció nuevas pistas sobre las raíces de los indios americanos y otros pueblos originarios del continente. Se trata del genoma más antiguo que se ha recuperado en el Nuevo Mundo y demuestra que el menor estaba estrechamente relacionado con los indígenas americanos. Tenía entre un año y un año y medio cuando murió por una causa desconocida.
Los artefactos que se encontraron junto al cuerpo indican que pertenecía a la cultura Clovis, que existió en Norteamérica hace 13,000 años y recibió su nombre por un yacimiento arqueológico cerca de Clovis, Nuevo México. El ADN revela también que los ancestros del pequeño provenían de Asia, lo que respalda la idea más aceptada de una migración a América por un puente de tierra desaparecido hace mucho tiempo.
En la ceremonia, Francis Alud, de la tribu Salish Kootenai, declaró que “estamos todos juntos hoy; mantengan esto en sus corazones mientras avanzamos desde aquí”.
De un vistazo
En contra
Francis Alud, de la tribu Salish Kootenai, criticó que se desenterrara el cadáver. “Puedo aceptar parcialmente la ciencia, si beneficia a la nación india”, declaró, y añadió que los nativos americanos han sufrido durante mucho tiempo debido a la pérdida de sus tradiciones, idioma y forma de vida.