Anteanoche unieron sus vidas con el sacramento del matrimonio los jóvenes Ricardo Rosas Cano y Jessica Andrea Enríquez Salazar, ante el altar de la iglesia de Nuestra Señora de Líbano, que lució adornada de casablancas, lilis y nardos.
La novia, quien entró a la iglesia del brazo de su padre, señor Mario Alberto Enríquez López, lució un vestido clásico de tul con encaje y pedrería en color “off white”, con bolerito para la misa, y velo tipo mantilla, todo de la diseñadora Rosa Clará; tocado de peineta con flores y ramo de magnolias.
Fueron padrinos de la pareja sus padres, señores Enríquez López, María Gabriela Salazar Lizama y Ricardo Rosas Moya. Impartieron la bendición nupcial los sacerdotes Legionarios de Cristo Rodrigo Hernández Preciado y Alexander Pavicevic Bas.
La pareja tendrá su luna de miel en París, Francia; Roma, Italia, un crucero por las islas griegas, Turquía, Dubai y las Islas Maldivas.
La boda civil fue en la Marina en Progreso y firmaron como testigos Andrés Enríquez, José María Ortegón, Martha y Rodolfo Rosas, Isabella Kelleher, Victoria Izaguirre y Juan Manuel Arrigunaga.
El novio es hijo de la señora Martha Ofelia Cano Ríos (que en paz descanse).
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Por error, ayer publicamos esta reseña con una fotografía equivocada, razón por la cual ofrecemos nuestras disculpas.