Por Pilar Varas Gómez (*)
Soy fan de Joaquín Sabina antes de que cantara en los túneles del Metro de Madrid y de que sus canciones fueran cantadas por otros artistas.
Este cantautor tiene cientos de canciones, pero la que hoy me llama la atención es una llamada “Ruido”. Comenta Joaquín que sus papás vivían encima de una discoteca (antro) y fue este hecho el que le inspiró a escribir esta canción, porque todas las noches se quejaban del ruido.
Soy española y las normas en cuestión de ruido en España varían según las Comunidades; se puede hacer ruido de 7 a 9 a.m. a 11 p.m. dentro de un baremo de decibelios. Si se pasa de esa acústica multan a las personas.
En Madrid viví en Parque Conde de Orgaz, zona próxima a la base aérea de los americanos en Torrejón de Ardoz. De allí despegaban y aterrizaban los aviones caza Phantom y los F15 y F16, aviones que son capaces de romper una o dos veces la velocidad del sonido, y cuando la rompen el estruendo que se oye es espectacular.
¿Saben por qué el avión supersónico Concorde está hoy desaparecido? Por el ruido que producía.
Convivencia
Para la buena convivencia vecinal vigilemos el nivel de ruido que hacemos en nuestras casas y procuremos no perturbar el descanso de los vecinos, sobre todo en lugares donde tiene su hogar la gente de edad adulta.
Cuando pasan los coches anunciando sus productos armando un gran escándalo pienso en aquellos bebés que se acaban de quedar dormiditos despertándose para desgracia de su mamá que tardó tanto en dormirlos.
También debemos tener cuidado con el ruido cuando organicemos un encuentro familiar o una fiesta.
Y siguiendo con la canción de Sabina, ésta dice: “Y con tanto ruido no se oyó el ruido del mar”… con lo hermoso que es oír el ruido del mar.
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*) Diplomada en protocolo y organización de eventos, y artista plástica. Correo: pvarases@msn.com.