HOUSTON.— El hospital Houston Methodist, que lidera los avances científicos en cardiología a través del uso de dispositivos equipados con tecnología digital, desarrolló el CardioMems para ayudar a personas con insuficiencia cardíaca.
El equipo detecta complicaciones tres semanas antes de que puedan afectar al paciente. “Es como tener a tu médico siempre contigo”, explica Ronnie Ramos.
Ronnie adora el ciclismo. Una noche empezó a sentirse asfixiado y que necesitaba adoptar diversas posiciones al dormir para no quedarse sin aire. “Estos síntomas no paraban y así pasé muchas noches. De esta manera empezó mi historia con la insuficiencia cardíaca (IC) y mi pérdida de calidad de vida. Tenía que ingresar a la sala de emergencia cada tres meses debido a la acumulación de líquidos en mis pulmones ocasionada por la IC”.
“Todo cambió cuando el equipo del Houston Methodist me hizo el implante del CardioMems hace seis meses. Ahora es como tener a mi médico siempre conmigo anticipando cualquier problema”, enfatiza.
“Las ondas de radiofrecuencia emitidas por el dispositivo nos permiten recibir diariamente los valores cardíacos de la persona”, explica el doctor Barry Trachtenberg, especialista del Houston Methodist.
“Esto es gracias a la comunicación inalámbrica que tiene el CardioMems con una almohada especial que debe usar el paciente y está equipada con una antena. Es así como los médicos podemos ver los valores desde teléfonos inteligentes o computadoras para tomar decisiones en el tratamiento”.
“Con el dispositivo me siento seguro, el nivel de monitoreo es eficaz ya que el sistema cuenta con internet. Unos meses después del implante me fui de vacaciones y de repente recibí una llamada de mi doctor, quien entre risas me preguntó acerca de lo que estaba comiendo, porque los valores reportados por el CardioMems advertían un alto consumo de sal. Es así como el doctor tomó una decisión para regularizar mis valores y esa decisión fue aumentar la dosis de mi medicina y controlar mi dieta”, agrega Ronnie, quien paulatinamente vuelve a ejercitarse en la bicicleta.
El aparato ingresa al organismo desde la vena femoral detrás del ligamento inguinal y se implanta en el corazón vía cateterismo. No representa riesgo de rechazo dado que no contiene factores de carácter biológico. Es un dispositivo totalmente electrónico que no requiere baterías, ya que es cargado inalámbricamente cada vez que se sincroniza con su consola externa.
Al no interferir la actividad cardíaca, no necesita extrarse luego del cuerpo.
“Los candidatos para usar CardioMems son las personas cuya insuficiencia cardíaca es de fase 3 en la Escala NYHA (New York Heart Association). En este estadio se puede sentir falta de aire cuando se realizan actividades simples del día a día”, enfatiza el especialista en cardiología de Houston Methodist.
El doctor Trachtenberg admite que están a la espera de más evidencias. “Las experiencias en el Houston Methodist han sido muy buenas. Hemos implantado ya 12 de estos aparatos, lo cual nos ha ayudado mucho a optimizar la calidad de vida de los pacientes, manteniendo sus presiones normales”.