¡Hola, Rebeca! Tengo un hijo de dos años. Prácticamente desde que nació mi esposa no lo atiende, ella se dedica a su trabajo y cuando está en casa busca cualquier pretexto para no estar con él. ¿Le afectará mucho? Saúl.
¡Hola, Saúl! La atención de los hijos es una tarea que tradicionalmente se le asigna a la mujer o que ellas mismas toman sin cuestionarse si les corresponde o no. Actualmente los roles se han modificado y las familias se integran de diferentes formas, situación que ha permitido que los padres tengan un mayor acercamiento que antes a sus hijos.
Insisto en la importancia de la madre en el desarrollo psíquico de los hijos debido a que ella tiene un rol definido al interior de la familia, independientemente de la forma en que esté integrada; sin embargo, debido a que es un rol, puede ser retomado por otra persona, por ejemplo su abuela, su tía o incluso tú, su propio papá.
Por supuesto que tu hijo necesita la atención de su mamá. Esta situación tiene su origen en la historia de vida de tu esposa, que debió experimentar circunstancias que ahora le impiden hacerse presente en la vida de su hijo, lo cual podría ser tratado en un proceso analítico que evidenciaría el origen de su forma de actuar, la haría tomar conciencia de su limitación y decidir modificarla. Sería conveniente que platiques con tu esposa y le sugieras iniciar un proceso terapéutico.
Con respecto a tu hijo, claro que le afectará, tal vez se vuelva huraño e inseguro y busque la atención de su mamá a como dé lugar; sin embargo, si tú le brindas la atención que requiere y logras desempeñar el rol del papá amoroso, comprensivo, que está al pendiente de él; lo apapachas, le curas los raspones, le das de comer, es decir, cubres las necesidades que tradicionalmente cubre una madre, disminuirás en mucho el nivel de afectación que pueda tener.
Independientemente de lo anterior, lo mejor sería que platiques con tu esposa y le hagas ver la situación que está generando, ya que puede ser que esté distraída y no se dé cuenta, incluso podrían llegar a un acuerdo para dividirse la responsabilidad y las actividades a realizar con su hijo.
Una vez que platiquen tú y tu esposa hablen ambos con el niño, díganle los acuerdos a los que llegaron para que él sepa cuáles son las cosas que puede solicitar a mamá y cuáles a papá, lo que hará más sencillo entender la nueva dinámica familiar.
Si tienes alguna duda sobre ser papá o mamá escríbeme a contacto@rebecavences.com. Si requieres apoyo para tratar algún problema personal o familiar pide una cita al 317-59-17.