MÉXICO.— “La carne de cerdo y los productos cárnicos aportan una amplia variedad de nutrientes que son esenciales para la alimentación de toda la familia”, asegura el doctor Antonio Villarino, presidente de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación.
“La carne de cerdo tiene un alto contenido de proteínas de alto valor biológico y aporta diversos minerales, como potasio, fósforo, zinc y hierro. Además, es fuente de vitaminas del grupo B, como la B1, B3, B6 y B12”.
Añade que la carne de ese animal contiene sustancias bioactivas con efectos antioxidantes y antihipertensivos, como carnosina, anserina, coenzima Q10, L-carnitina, taurina, glutatión, glutamina, creatina, creatinina y péptidos activos.
El doctor Villarino fue uno de los participantes en las XIX Jornadas Internacionales de Nutrición Práctica que se celebraron recientemente en la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid. Ofreció la charla “El papel de la carne de cerdo en la alimentación”.
El médico afirma que los expertos recomiendan un consumo de carnes magras de tres a cuatro raciones por semana (de 100 a 125 gramos cada ración), de cortes como lomo o solomillo, que brindan “una gran proporción de los requerimientos diarios de nutrientes con un contenido mínimo de grasa”.
Indica que la carne de cerdo tiene diversidad de cortes que se adaptan a las diferencias fisiológicas o patológicas de los individuos.