NUEVA YORK.- La Academia Estadounidense de Otorrinolaringología y la Fundación Quirúrgica de Cabeza y Cuello publicaron recientemente nuevas directrices sobre lo que se debe hacer y lo que no para tratar la llamada “rinitis alérgica”.
Las principales recomendaciones son las siguientes:
Para los pacientes con congestión nasal, decoloración de las vías nasales y/u ojos rojos y llorosos los médicos deberían dejar de lado el proceso de imágenes de los senos nasales y, en lugar de eso, “hacer pruebas específicas de la IgE”. Esto implica la exposición de muestras de la piel o de sangre a una serie de posibles desencadenantes de alergenos para llegar a un diagnóstico definitivo de rinitis alérgica y sus causas.
“Los controles ambientales” para tratar con los desencadenantes problemáticos podrían incluir el uso de agentes químicos para matar los ácaros del polvo, la instalación de sistemas de filtrado del aire, el uso de sábanas con barreras para los alergenos o deshacerse del perro.
Para las personas cuya calidad de vida se ve afectada por las alergias nasales, otros tratamientos incluyen los aerosoles nasales esteroides solos o en combinación con antihistamínicos más nuevos, que tienen menos probabilidades de causar somnolencia que versiones anteriores.
Medicamentos como zafirlukast (Accolate) y montelukast (Singulair), conocidos como antagonistas del receptor de leucotrienos orales, no se aconsejan como un tipo de tratamiento inicial.
La inmunoterapia (las inyecciones de desensibilización o las pastillas sublinguales) es una opción cuando los medicamentos y los controles ambientales no funcionan.
La cirugía nasal llamada reducción turbinal debería ofrecerse cuando el tratamiento médico fracasa.
A los pacientes que deseen evitar los medicamentos tradicionales se les puede sugerir la acupuntura.
Solución | Futuro
Según los especialistas, la inmunoterapia podría ser el tratamiento del futuro.
¿Qué es la inmunoterapia?
Implica poner a los pacientes con cuidado en un régimen controlado que aumenta progresivamente la exposición al alergeno.
Síntomas
Según la doctora Sandra Lin, de la Universidad Johns Hopkins, la respuesta inmunitaria natural que resulta puede reducir dramáticamente e incluso eliminar los síntomas de alergia en algunas personas.