Maestra en Psicología Rebeca Vences Solís
Ser padres
¡Hola, Rebeca! Este año me he hecho el propósito de mejorar la comunicación con mis hijos; una tiene 15 años y el otro 9. ¿Me puedes dar una sugerencia para lograrlo? Gaby.
¡Hola, Gaby! Tu propósito incluye un compromiso muy grande que adoptaste cuando decidiste ser mamá y ahora lo ratificas de forma consciente y con la firme idea de cumplirlo, lo cual evidencia un gran interés en que las cosas mejoren en tu hogar. La diferencia de edades de tus hijos obliga a pensar en situaciones diferentes de acercamiento a una y otro.
Tu hija es una adolescente que requiere acompañamiento la mayor parte del tiempo, es decir, todo lo que le suene a autoridad, llamada de atención, regaño o castigo lo va a aborrecer y tomará actitudes rebeldes y de confrontación. El acompañamiento es estar presente en su vida sin ser invasiva pero proporcionando siempre la escucha, el apoyo y sostenimiento necesarios cuando ella lo solicite o sus acciones evidencien que lo requiere. Es un poco complicado porque debes ser muy cuidadosa al ofrecer tu ayuda, la cual debe ser lo suficientemente sutil para que no se sienta observada, pero al mismo tiempo te permita mostrarle tu amor y preocupación de que esté bien.
Tu hijo aún no llega a la pubertad, por lo que está en proceso de socialización con las personas que lo rodean y es un poco más controlable; la confianza que desde ahora establezcas con él te dará una base suficientemente sólida para cuando llegue a la adolescencia. Tu opinión es muy importante para él, así que procura tomarlo en serio aunque sientas que sus preguntas o comentarios son ingenuos; al mismo tiempo procura enseñarle a no tomarse demasiado en serio, que aprenda a reírse de él mismo para hacer frente a las situaciones que se pueden presentar en la familia o con sus amigos cuando empiece a importarle más lo que dicen de él fuera de casa.
Adicionalmente, es importante que sigas estableciendo límites para que las cosas funcionen de la mejor manera, dales responsabilidades de acuerdo con sus actividades, que sepan que para obtener algo deben hacer un esfuerzo, sea sacar buenas calificaciones, limpiar su habitación o ayudar en las labores del hogar, entre otras, para obtener permisos o dinero para un antojo o capricho.
Por último, recuerda que lo más importante es demostrarles tu amor en todo momento, en los buenos y en los malos, que ellos identifiquen que, a pesar de que en algún momento puedas parecer muy estricta o muy suave, lo que te mueve es que buscas lo mejor para ellos.
Les deseo a mis amables lectores un 2015 lleno de éxitos en todo lo que emprendan. Si tienen alguna duda sobre el ser papá o mamá escríbanme a contacto@rebecavences.com. Si requieren apoyo para tratar algún problema personal o familiar pide una cita al teléfono 317-59-17.