María Bartola Alejos Sosa es la mujer “de azúcar” que causa grata impresión a todo el que la conoce, y sorprende a la medicina y la odontología.
A sus 103 años de edad, no padece ninguna enfermedad, camina, tiene dentadura completa, no usa gafas, escucha bien, tiene buen humor y memoria clara.
“No hay nada mejor que la tranquilidad…, dormir temprano y no tener disgustos”, indica la centenaria dama meridana al compartir el “secreto” para vivir muchos años y con salud. “Lo mejor es la vida tranquila”, dice.
Algunos de sus familiares añaden un “secreto” más sobre su longevidad: “tomar una cerveza antes del almuerzo”. Desde temprana edad recuerdan que la decían que era “de azúcar” por su buen humor, porque no tiene problemas y siempre ha estado rodeada de gente. Ella “se deja querer”.
María Bartola, conocida como “doña Maruchita”, celebró sus 103 años el 28 de agosto, cuando se conmemora el Día del Adulto Mayor.
Es la mayor de cinco hijos del matrimonio que formaron Francisco Alejos Peralta y Margarita Sosa Sansores.
Toda su vida la dedicó al cuidado de su hogar, desde que contrajo matrimonio, a los 15 años de edad, con Plutarco Camacho Vázquez. Durante un tiempo radicó en Oxnard, California. Tiene nociones de inglés por los estudios de primaria que cursó en el Colegio Americano.
Entre otras cosas, dice que el mejor regalo por sus 103 años es la tranquilidad. María Bartola comenta que ella no se enfurece, no ha tenido problemas con sus hijos ni con nadie.Ante los disgustos, lo que recomienda a las personas es ir “despacio” ante “cualquier cosa”.Dice que ella siempre ha sido feliz, no necesitó trabajar, tuvo todo con su familia y conoció varios lugares.Recuerda que la Mérida de antaño era bonita y tranquila. Fe vecina del centro meridano, de la colonia Vicente Solís y de la 42 Sur.Como a ella le gustaba bailar, con su marido acostumbraba ir a bailes, recuerda.Toda su vida ha comido de todo, con horarios establecidos. A las 7:30 de la mañana desayuna cereal con avena y leche; a las 12 del día almuerza lo que se prepare en la casa, y a las 6, de la tarde cena galletas María o de soda y leche. Los sábados no pueden faltar en su mesa los panuchos y el chocolate.”Me siento muy bien. No tengo ningún dolor, ni nada”, asegura.- Claudia Sierra Medina
Dama | Semblanza
La centenaria dama no padece enfermedades, sólo los achaques de la senectud.
Buenos dientes
En el servicio dental le dijeron que “tiene dentadura como de una persona de menos edad”, comentan varios familiares.
Descendencia
María Bartola tuvo seis hijos: Rubén e Irene Antonia (que en paz descansen); Margarita, Norma Elidé, José María y Javier Raymundo. Tiene 25 nietos, poco más de 40 bisnietos y 40 tataranietos”, nos informan.
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