NUEVA YORK (HealthDay News).- Un nuevo estudio indica que cuando una mujer bebe mucho alcohol durante el embarazo los efectos dañinos en el desarrollo cerebral de su hijo parecen mantenerse a lo largo del tiempo.
Los descubrimientos ofrecen una posible razón de los problemas persistentes de atención y conductuales de los niños con trastornos del espectro alcohólico fetal, señalan los investigadores.
Los expertos usaron imágenes de resonancia magnética funcionales para monitorizar la actividad cerebral de los niños con y sin trastornos del espectro alcohólico fetal durante dos años. Los resultados mostraron que los niños con el trastorno presentaban una activación cerebral más débil mientras hacían ciertas tareas mentales que los que no tenían el trastorno.
“Hallamos diferencias significativas en la activación del desarrollo cerebral a lo largo del tiempo entre los dos grupos, aunque no hubo diferencias en el rendimiento en las tareas”, afirma la autora principal del estudio, Elizabeth Sowell, directora del Laboratorio de Neuroimágenes del Desarrollo Cognitivo del Instituto de Investigación Saban del Hospital Pediátrico de Los Ángeles.
El estudio aparece en la revista “Cerebral Cortex”.
Los hallazgos muestran que beber durante el embarazo puede cambiar el modo en que la señalización cerebral del niño se desarrolla durante la infancia y la adolescencia, mucho después de ser expuesto al alcohol. Una menor activación cerebral explicaría problemas persistentes de atención y conducta.