DUBLÍN (EFE).- Descendientes de las víctimas del hundimiento del Titánic recordaron ayer el 102o. aniversario del accidente más famoso de la historia de la navegación, en Belfast, ciudad de Irlanda del Norte donde se construyó el transatlántico.
El acto tuvo lugar en la sede del ayuntamiento de la capital norirlandesa, a escasa distancia de los astilleros Harland & Wolff, donde se botó el buque el 31 de mayo de 1911. Menos de un año después, en la madrugada del 15 de abril de 1912, el Titánic se fue a pique en el Atlántico Norte tras chocar contra un iceberg, lo que causó la muerte de más de 1,500 personas.
Los asistentes al servicio de ayer depositaron flores ante el monumento erigido en sus jardines en honor de las víctimas del hundimiento.
El presidente de la Sociedad Titánic de Belfast, John Martin, cuyo tío abuelo John Edward Simpson falleció en el accidente, dice que el interés que aún despierta el tema es “importante”.
“Algunos tienen conexiones familiares directas con gente que estuvo a bordo, otros estaban relacionados con la gente que lo construyó y los hay que están más interesados en las causas que provocaron el accidente”.